-¿Sabes cuáles fueron las innovaciones introducidas en la agricultura en el siglo XIX?
-¿Y a mí qué me dices? ¿No sabes que soy analfabeta?
-¿Qué tal los deberes?
-Cantidad de chungos
-Bueno, venga, te voy a ayudar
-A ver, dime cuáles de estos autores son románticos y cuáles realistas
-Ibsen
-Romántico
-Lord Byron
-Ese realista
-Goethe
-Realista también
-Y Balzac
-Romántico.
¿Ves qué fácil?
¿Ves qué fácil?
-¡Hala, un buen tazón de madalenas! Lo mejor para la diabetes
-Ay, se le olvidaba que soy diabética
-Siempre se le olvida a la hora de comer
-¿Qué es eso?
-Un palo. No encontré el látigo, pero esto duele igual o más
-¿Pego ya?
-No,
hombre, no. Yo lo que quería era una escena tópica, de sadismo tópico,
elegante y sofisticado, como esas que se ven en las películas francesas
-Lo que pasa es que tú no eres un sádico de verdad
-Claro
que no, yo he venido aquí a informarme para escribir una novelita
porno, que se venda mucho. Pero ya veo que tendré que inventármela yo.
-Pues invéntatela, que para eso eres escritor
-¿No quieres que te haga alguna cosita?
-Sí, hazme de mesa
-Se me está ocurriendo una idea que puede ser más comercial que la novelita porno
-Yo creí que los escritores erais más viciosos
-Esos son los buenos
-¿Cuándo volverás?
-No lo sé
-¡Cómo no vuelvas se lo digo a tu mujer!
-No la conoces, menuda es
-Era una broma, para excitarte, yo soy incapaz de hacer esas cosas
-Si hay alguna movida yo no quiero saber nada, que soy un chinorri
-Uy un chinorri, no tienes tú años de calle ni nada
-No tantos, catorce
-No,
si cuanto antes se sepa lo que es la vida, mucho mejor. Si quieres
alguna otra cosa no tienes más que pedírmelo. Mejor que empieces con la
tía cristal que con cualquier pelandrusca
-Gracias, pero no me vas
-Gracias, pero no me vas
-¿Quieres que te enseñe el vestido de novia que me he hecho?
-¿Es que te vas a casar?
-No, es para jugar a la noche de bodas. ¿Tú no sabes jugar a eso?
-¿Me acompañas?
-Es que se me hace muy tarde
-Luego te presto el paraguas
-Entonces sí, porque para una vez que me prestas algo, mujer
-Gloria, a ver si te haces algo en el pelo porque lo llevas fatal, mira que puntas
-Las puntas, y el tinte y todo. Es que nunca tengo tiempo de ir a la peluquería, mujer
-Pues cómprate un moldeador y un champú color y te lo tintas en casa. Mira como llevo yo el pelo a mi Vanessa.
-¿Un moldeador? ¡Menudo lujo! He tenido que coger dos casas más porque con lo de Antonio no nos da ni para la boca de Miguel
-Yo por mí te lo dejaba, pero es que soy muy maniática para mis cosas
-No, si ya entiendo, ya
-Aparte, que la Vanessa tampoco quiere
-Mira ese moldeador, ¿no está mal de precio, verdad?
-¡Qué barato! El mío es mucho más caro. Claro, que es mejor
-Pues a mi me gusta
-Bueno, no está mal
-Oye, ¿me das cinco duros para jugar a la máquina?
-Aquí tiene, una monedilla
-Tengo un vicio, es lo único que me gusta de Madrid
-En mi pueblo dicen que el que no ha visto Graná no ha visto ná. ¿tú has visto Granada?
-No, nunca he estado
-Yo tampoco
¿Quieres ganarte un dinerito cómodo y fácil?
-Pues verá. Yo sudo mucho. Se me cae el pelo. Esto que llevo es una prótesis
-Yo no soy dermatólogo
-Además, soy un poco impotente
-¡Ah, bueno! ¿y con quién?
-¿Cómo que con quién?
-Sí, ¿con hombres, con mujeres?
-Pues con las mujeres, ¿con quién va a ser?
-¿Está seguro que no le gustan los hombres?
-No
-¿Sale usted con alguna chica? ¿Tiene usted novia?
-Sí
-Pues el próximo día me la trae usted
-Bueno, ¿pero qué es lo que me pasa?
-No creo que sea nada importante, el próximo día investigaremos las causas y todo eso, pero es que hoy me siento fatal
Está
resentida porque nadie le dice "por ahí te pudras". Mira Gloria, yo
comprendo que no todas podéis tener un cuerpo como el mío, que vuelve
locos a los hombres, pero es que también las feas podían tener un
poquito de educación, vamos, digo yo.
-¿Es usted Crystal?
-Crystal Scott
-Le importa enseñarme la documentación?
-¿Es que no me cree? Pues tendré que mirar porque ahora mismo no sé donde lo he puesto
-Aquí pone Carmen Martínez
-Es que soy actriz y cantante
-Ya veo el vestuario
-¿Es un delito tener talento?
-Depende para qué.
